El Estudiante de la Institución Educativa Técnica Pérez y Aldana, como “fruto del cultivo armónico y el ejercicio conveniente de sus potencialidades, facultades y operaciones”, es una PERSONA:
- Que debe aprender a educarse, aprender a ser, aprender a obrar y aprender a emprender. Esto exige que todo estudiante, construya los conocimientos, habilidades y destrezas, los hábitos y los valores que lo capaciten para asumir la responsabilidad de desarrollarse como persona, individual, social, espiritual y ecológica; todo lo anterior, exige que el estudiante llegue a dominar la capacidad de desarrollo intelectual, psicomotor, afectivo, volitivo, espiritual y de conciencia que le garanticen alcanzar los objetivos de formación integral.
- Capaz de formarse una personalidad estructurada en procesos, saberes, competencias y valores consistentes y universalmente válidos, como la autonomía, la responsabilidad y la trascendencia para “aprender a ser”.
- Capaz de construir personalmente la capacidad, el sentido y comportamiento a partir de la escala de valores de cada persona y de actuar con los mismos, autónoma, responsable y trascendentemente.
- Que profundice en un campo del conocimiento o en una actividad específica de acuerdo al proyecto educativo institucional, la articulación con el SENA y / o cualquier Universidad y a los intereses y capacidades propios en concordancia con los objetivos del plan educativo.
- Capaz de incorporar la investigación al proceso cognoscitivo, tanto de laboratorio como de la realidad nacional, en sus aspectos natural, económico, político y social.
- Que se vincula y se compromete a desarrollar y organizar programas de tipo social y comunitario, orientados a dar solución a los problemas de su entorno.
- Que participa y promueve las acciones cívicas y de servicio social en la comunidad local.
- Que desarrolla la capacidad reflexiva y crítica sobre los múltiples aspectos de la realidad y la comprensión de los valores éticos, morales, religiosos y de convivencia en sociedad.
- Comprometida con una organización social que conlleve la transformación de estructuras sociales injustas, excluyentes e insolidarias.
- Con capacidad de adaptarse a nuevas situaciones, de aprender de la propia experiencia y de trasformar su medio en orden a su propio bien y el de los demás.
- Que vive en verdad y discernimiento desde la práctica de la justicia y la equidad, en los diferentes contextos.
- Que ejercita la autonomía y el manejo de una libertad responsable desde la conciencia moral y el respeto por la diferencia.
- Que vivencia el amor como estilo de vida en solidaridad y en el reconocimiento de la dignidad de cada persona.
- Capaz de relacionarse ética y armónicamente consigo misma, con los demás, con la naturaleza y con Dios.
- Capaz de explorar y profundizar en su propio conocimiento
- Que ha desarrollado un conocimiento de sí misma, una elevada autoestima que le permite crear relaciones de equidad entre los géneros.
- Capaz de forjarse un ideal y consagrarse a él.
- Invitada a lanzarse a la conquista de su realización personal irradiando alegría y optimismo.
- Con proyecto de vida definido, basado en los valores humanos fundamentales: defensa de la vida, la justicia y el compromiso con la transformación de la sociedad.
- Que construye cooperativa y participativamente el conocimiento desde la realidad y la experiencia, aportando sus propias capacidades, habilidades y destrezas en forma creativa.
- Competente para la autoevaluación y autorregulación mediante la reflexión de su propio proceso de pensamiento y aprendizaje.